Puede pasar que lo bueno de mi vida piense que me lo curro yo y lo malo me pasa por «culpa de los demás». Si me pisas, es tu culpa; y si te piso yo, es porque has puesto el pie debajo del mío. Ayy ay ay…
El famoso: he aprobado; me han suspendido.
¿Eres responsable de algo?.
Los actos tienen consecuencias y siempre hemos de estar dispuestos a asumirlas con responsabilidad.
Parece que hoy todo sucede por la «conjunción de los astros». Pues no.
Las cosas suceden porque ha habido una decisión por parte de alguien o una cadena de decisiones. La decisiones, más o menos, afectan a los demás para bien o para mal. Hay decisiones que no pueden ser fruto de una decisión impulsiva o egoísta sino de una decisión de amor donde pones en la «balanza de tu conciencia» si te hace mejor persona o te hace más egoísta, más esclavo. Cuidado porque también el no tomar una decisión es tomarla. Y quieres parecer ajeno a las consecuencias….pero «fake news».
Houston, Houston tenemos un problema! Aquí no hay nadie que de la cara y parece que las cosas suceden en el azar. No no……aquí a afrontar las cosas de cara. Me he equivocado: pido perdón; he acertado pues ¡qué bien! y gracias.
Asumir con responsabilidad las consecuencias de mis actos u omisiones es un acto de madurez. Lo contrario……de inmadurez.