¿Cómo vais con la pista americana? Yo estoy en ello.
Esta semana he tenido la suerte de mirar el mar y pasear por la orilla. Me encanta disfrutar de su infinito, de ver el horizonte, sin límites. Así pensaba….a las personas que quiero me encantaría poder mostrarles lo maravilloso del amor infinito. A las personas que quiero me encantaría abrirles horizontes nuevos. El horizonte significa esperanza.
La esperanza abre el corazón, da vida.
Sin esperanza estamos muertos, somos zombies andantes, sin rumbo.
Sólo pueden ser felices los vivos. Felicidad y amor van de la mano y sólo ama quien vive, quien espera, quien tiene un corazón abierto al infinito, como el mar. Sólo puede ser feliz el que vive amando, esperando, viendo un horizonte amplio de vida para luchar y salir adelante.
El que tiene el corazón encogido, pequeño, estrecho, sin miras….acaba por morir en vida.
Que al ver el mar pensemos en nuestra vida: tener miras largas, amplias, espumosas. Salir de nosotros mismos y jugar «con el mar «…un poema …jugar con mi vida sin perder nunca el sentido del humor que me ayuda a no perder la esperanza.
Siempre hay un horizonte nuevo. Aprender a verlo en el día día….un nuevo reto.
Sin olvidar la pista americana.